Repair Lab, creación de enlaces mediante la reparación de objetos

Repair Lab, Laboratorio Itinerante de Reparaciones Humanitarias, es un  taller itinerante de reparaciones, dirigido por un equipo de voluntarios en espacios de vida informal. Este dispositivo de proximidad permite a personas en situaciones de exilio o en tránsito y a las personas en situación muy precaria reparar ellos mismos sus efectos personales.

Este proyecto piloto responde a tres necesidades identificadas sobre el terreno por la Cruz Roja Francesa en sus actividades de apoyo a los exiliados: 

Las personas en exilio, pero también en situación de tránsito, se enfrentan a un deterioro de sus bienes personales debido a las difíciles condiciones en las que sobreviven. A menudo se encuentran en una situación de dependencia de los actores humanitarios, lo que puede contribuir a un sentimiento de desrealización y deshumanización. La falta de perspectivas y las interminables esperas, provocadas por las complejas situaciones administrativas suelen generar problemas secundarios de salud mental.

Para hacer frente a estos tres retos, la Cruz Roja Francesa ha puesto en marcha el diseño de un nuevo tipo de Punto de Servicio Humanitario: el primer laboratorio móvil de reparación humanitaria. Se trata de convertir a las personas exiliadas y/o sin hogar en actores activos de la satisfacción de sus necesidades, a través de dos objetivos:

• En primer lugar, el Lab de Reparaciones les brinda la oportunidad de reparar ellos mismos objetos personales afectados por sus condiciones de vida, gracias al acceso a talleres de reparación y a la supervisión de compañeros voluntarios que aportan herramientas, materiales y máquinas (textiles, electrónicas, mecánicas, etc.).
• El Lab de Reparaciones también ofrece actividades diseñadas para reforzar sus habilidades psicosociales y mejorar su salud mental y autoestima, a través de servicios de acogida, sistemas de escucha, procesos de orientación y actividades creativas. 

Poder reparar objetos personales ofrece a los beneficiarios una forma de proteger su dignidad. Caminar con los zapatos rotos, perder un número de teléfono que se ha borrado porque estaba escrito en una hoja empapada por la lluvia, no poder cargar el teléfono por culpa de un cable cortado o pasar frío por culpa de la ropa rota o de un edredón con un agujero son hechos habituales en los lugares donde trabaja el Laboratorio Itinerante de Reparaciones Humanitarias. Estos objetos podrían repararse fácilmente. El Laboratorio de Reparaciones proporciona los recursos, la asistencia técnica y el lugar para hacerlo. 

Se han desarrollado y testado cuatro formatos de Laboratorio de Reparaciones, en función de las capacidades de los equipos locales y del contexto de la operación: 

• Para los lugares al aire libre más grandes, un camión de 20 m3 totalmente equipado;
• Para los lugares de más difícil acceso, un carro de trabajo impulsado por una bicicleta eléctrica;
• Vehículos más tradicionales y ligeros con equipos de reparación cargados en el maletero;
• Una versión más ligera, una mochila de primeros auxilios convertida en mochila de reparación merodeadora con herramientas y equipos de avería.

El experimento ha sido posible gracias al apoyo financiero de la Federación Francesa de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja. En Francia, el Laboratorio de Reparaciones está actualmente activo o en fase de lanzamiento ,en 3 territorios diferentes de Francia (Hérault, Rhône y Hauts de France) con una media de 2 a 3 despliegues por semana a lo largo del año. 

Durante cada despliegue (de media ½ día), los equipos de intervención (min 3-4 voluntarios) trabajan principalmente con exiliados en tránsito y personas sin hogar, ofreciendo las siguientes actividades. 

Actividades manuales de reparación y personalización en diversos campos

• Textil (por ejemplo, cremalleras, mochilas, ropa, zapatos, etc.), 
• Electrónica (por ejemplo, lámparas, auriculares, teléfonos móviles, etc.), 
• Mecánica (por ejemplo, bicicletas, juguetes, etc.)
• Protección de documentos (por ejemplo, copia, plastificación, escaneado, etc.),

Servicios de acogida, escucha y orientación con

• Té/café y galletas 
• Zona de debate; 
• Información sobre derechos e iniciativas sociales locales.

Uno de los principios fundamentales de nuestro trabajo es «trabajar con» en lugar de «para». Al situar a los beneficiarios en el centro de la acción, ayudan a construir una relación horizontal y fomentan la resiliencia a lo largo del proceso migratorio. A menudo reciben comentarios de que los beneficiarios se sienten orgullosos y felices de haber hecho lo que tenían que hacer ellos mismos. 

Los responsables del proyecto buscan constantemente «puntos de relevo», que suelen ser asociaciones colaboradoras de las ciudades donde actúa el Laboratorio de Reparaciones, para que las personas con las que se encuentran sepan dónde pueden reparar sus objetos personales, sin depender únicamente del Laboratorio de Reparaciones. De este modo, después de un despliegue, las personas con las que nos encontramos están informadas de la existencia de otros espacios seguros donde pueden satisfacer sus necesidades por sí mismas.

En 2023, año en que se pondrá a prueba el sistema: 

• Más de 1.000 personas de 20 nacionalidades han participado en las actividades de los Laboratorios de Reparación; 
• Más de 60 voluntarios han organizado y dirigido cerca de 80 Laboratorios de Reparación en las regiones de Hérault, Rhône y Hauts de France.

Por encima de las cifras, son las anécdotas las que dan testimonio de los momentos compartidos. Hay muchos momentos e historias colectivas, y cada uno cuenta. 

Entre la multitud de objetos reparados, podemos citar los siguientes ejemplos: 

• Un niño rumano que salió con su avión de juguete de poliestireno reparado y una gran sonrisa en la cara. Toda su familia esperó mientras él y el equipo de voluntarios lo reparaban. Toda la familia sabía lo importante que era para él;
• Un solicitante de asilo, antiguo voluntario de la Cruz Roja de Malí, que vino a coser su qamis a toda prisa para poder ir a rezar a la mezquita;
• Un joven guatemalteco, que había dejado su país con su cafetera, que ahora goteaba, pero que le traía recuerdos preciosos;
• Durante la reparación de una bota deportiva, un futbolista nigeriano descubre cómo ejercer su profesión en Francia y entrar en contacto con los clubes locales;
• Muy a menudo, personas de distintas nacionalidades se ayudan mutuamente en una reparación.

Una mañana, mientras se distribuía el desayuno en un centro de día, 5 personas de 5 nacionalidades distintas hicieron cola para ayudar a una sexta a reparar su cremallera rota.

El impacto del proyecto es también, y sobre todo, las conversaciones, historias de vida, confidencias y peticiones de ayuda y derivaciones a otros agentes sociales que surgen de una pausa tomando una taza de achicoria, entre dos reparaciones. Son los comentarios de la gente que dice lo feliz que está de que se le tenga en cuenta, o lo bien que le hace sentir la música. Son las personas que esperan con impaciencia la llegada del Laboratorio de Reparaciones semana tras semana. También son los participantes que piden unirse al equipo de intervención para ayudar a otros y seguir implicándose junto a nosotros.   

El Laboratorio de Reparaciones Humanitarias itinerante entra ahora en una fase de expansión. Para apoyar a los equipos del movimiento de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, así como a otras organizaciones humanitarias, han desarrollado un conjunto de herramientas de código abierto que está disponible previa solicitud. 

Testimonios : 

«Gracias a la Cruz Roja Francesa, he reparado mi teléfono móvil gracias a vosotros» (Karamoko, de paso para desayunar en el centro de día).

«Poder coserme los sujetadores es importante. Un poco de feminismo en este mundo brutal» (Anne, actualmente sin hogar)

«Salí de Guatemala con esta cafetera, es importante para mí» (Sergio, solicitante de asilo).